Decía en una entrada del Blog:
El 11 de julio de 2014
“Ramírez de Arellano en un ensayo que publicó, hablaba de un ejemplar, en la Sección de Anónimos Manuscritos que se titulaba "Casos Raros de Córdoba". Había varios ejemplares más de este libro, manuscritos también. En la Real Academia de la Historia "Sucesos y casos notables de la ciudad de Córdoba", otro propiedad del Sr. Pavón, "Casos raros ocurridos en la ciudad de Córdoba", y otro en la Biblioteca Colombina de Sevilla, "Diálogos entre Colodro, Escusado y Osario. Casos especialísimos de Córdoba".
Pues bien en 1982 un grupo de amigos constituyeron con más voluntad que medios, una editorial Albolafia, con la finalidad de recuperar documentos que fuesen útiles para la memoria de esta ciudad, y ello los lleva a editar en facsímil, este libro "Casos Notables de la Ciudad de Córdoba", partiendo de uno que estaba depositado en la Fundación Ruiz Luque de Montilla, cedido para ello por Manuel Ruiz Luque miembro destacado de la Editorial citada.
Desaparecida ésta, a los veinte años, un decidido editor, mi amigo Francisco Baena Altolaguirre, esposo que fue de mi querida amiga Tere Alcántara (si a Baena le sumas Alcántara, y le pones delante María de los Dolores, te da el nombre y apellidos de la Directora de nuestro Museo Arqueológico), edita una tirada de un libro que debía estar en la biblioteca de cualquier cordobés que se precie de ello. Yo lo busco en la Luque y me dicen que está fuera de catálogo pero que se lo pueden pedir al editor, a Paco Baena, les digo que yo hablaré con él. Hablo y me llaman de la Luque para que me pase a recoger un ejemplar. Venía con una tarjeta de Paco, que guardo, que decía "para Francisco Muñoz". Desde entonces disfruto del contenido del mismo. Todavía le quedan algunos ejemplares de esta edición especial”.
El 11 de julio de 2014
“Ramírez de Arellano en un ensayo que publicó, hablaba de un ejemplar, en la Sección de Anónimos Manuscritos que se titulaba "Casos Raros de Córdoba". Había varios ejemplares más de este libro, manuscritos también. En la Real Academia de la Historia "Sucesos y casos notables de la ciudad de Córdoba", otro propiedad del Sr. Pavón, "Casos raros ocurridos en la ciudad de Córdoba", y otro en la Biblioteca Colombina de Sevilla, "Diálogos entre Colodro, Escusado y Osario. Casos especialísimos de Córdoba".
Durante algo más de tres siglos, los transcurridos entre la primera mitad del siglo XVII y el año 1949, el lector medio no pudo disfrutar con la lectura de los CASOS NOTABLES DE LA CIUDAD DE CÓRDOBA, ya que durante ese periodo sólo existieron escasos ejemplares manuscritos. A pesar de la escasez de ejemplares, el pueblo cordobés tuvo cumplida noticia de este libro a través de las citas que eruditos como Ramírez de Arellano introducían en sus escritos, lo que acrecentó el deseo de su lectura.
Córdoba, Otoño de 2003
Francisco Baena Altolaguirre”
UN DESEO DE MENÉNDEZ Y PELAYO
En carta fechada en Santander a 25 de enero de 1911 decía don Marcelino Menéndez y Pelayo a don Agustín González de Amezúa, después de agradecerle el folleto de éste sobre las fuentes de “El médico de su honra, extracto de la Revue Hispanique: “”¿No le parece a usted que hoy, que se publica todo, valía la pena el libro de los Casos de Córdoba de entrar en cualquier colección de bibliófilos, o de la Revue Hispanique?- porque recreativo y curioso, lo es sin duda. Anímese usted a hacerlo.»El señor Amezúa había utilizado en su artículo un pasaje de los Casos de Córdoba (Nº66) sobre el suceso del médico don Pedro Mato. Andando los días, se ha decidido a dar este libro en la serie de nuestra Sociedad de Bibliófilos Españoles, y ha tenido la bondad de encargarme que me ocupara en la edición del manuscrito que el autor de Los orígenes de la novela deseaba ver en letras de molde.
Don Marcelino Meléndez Pelayo
Del manuscrito, y del índice de su contenido, pudieron tener noticia los estudiosos desde que, en 1922, don Rafael Ramírez de Arellano publicó su valioso “Ensayo de un Catálogo biográfico de escritores de la provincia y diócesis de Córdoba, con descripción de sus obras”, en cuyo volumen II, páginas 180-184, sección de Anónimos Manuscritos, da noticias del escrito titulado “Casos raros de Córdoba”, ms. en 4º, de su biblioteca particular:
No logró el señor Ramírez de Arellano, ni yo tampoco lo he conseguido, identificar al autor de este centón. Consta en sus páginas que se terminó de escribir en 1618 (núm. 70, pág. 216), y no deja de hacer alusiones a sí propio, a sus conocimientos y relaciones con los personajes de sus casos, a fechas concretas en que el autor se hallaba aquí o allá. Probablemente era sacerdote, Y muy afecto a la Compañía de Jesús, y empezó su relato contando preferentemente cosas relacionadas con la vida del Beato Juan de Ávila; y parece que era de familia noble, ya que muchos relatos extraña un poco que prefiera explicarlos por el punto de honor, de opinión o de fama, mejor que por las doctrinas éticas del catolicismo. Arellano observa que el autor menciona la relación de sus padres con la casa de los Marqueses de la Guardia (Nº 83, Pág. 259).
Ha fallecido a los 78 años Francisco Baena Altolaguirre (Córdoba, 30 de mayo de 1936). De pequeño se quedó huérfano y ha sido un autodidacta nato. Desde muy joven comenzó a trabajar en el mundo del libro ya que era un gran lector, convirtiendo su pasión por los libros en su actividad profesional, junto a su mujer, Teresa Alcántara, de la que enviudó hace seis años. Eran padres de 5 hijos y tenía 8 nietos. Baena estuvo trabajando en la sección de librería de la antigua Galerías Preciados, posteriormente estuvo trabajando en la Biblioteca municipal, pero enseguida se adentró en el mundo de la distribución de editoriales junto con su esposa. También llegó a montar una pequeña editorial, denominada Albolafia, desde donde recuperaba textos de la historia de Córdoba. Durante treinta años fue una de las personas que contribuyeron a que la Feria del Libro de Córdoba estuviera siempre presente en la ciudad. Fue también fundador de la Asociación Andaluza de Editores. También fue promotor, junto con uno de sus hijos, de la Librería Anaquel. Por tanto, la vida de Francisco Baena ha girado en torno al mundo de la cultura y del libro. Francisco Baena ha sido asimismo una persona de las que contribuyen a hacer ciudad y cultura, siempre desde la discreción. Era una persona comprometida con su tiempo: tuvo una comprometida labor sindical y del movimiento ciudadano. Hasta que enfermó estuvo poniendo en valor la biblioteca del centro de Poniente. RAFAEL CASTRO
Bibliografía del libro Casos Notables de la Ciudad de Córdoba.